SantuarIO DE
NUESTRA SEÑORA de LourdeS
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NUESTRA visiÓn
Continuar siendo un centro mundial de peregrinación.
Un Santuario para la sanación del cuerpo y el consuelo del corazón.
LOURDES ES EL MUNDO AL DERECHO, UN LUGAR DONDE LAS PERSONAS ENFERMAS Y CON DISCAPACIDAD SON LA PRIORIDAD ABSOLUTA, COMO DEBERÍA SER EN TODA SOCIEDAD.
Desde la primera de las 18 apariciones de la Virgen María a Bernardita Soubirous en 1858, miles y luego millones de peregrinos de todo el mundo se han reunido en torno a la Gruta de Lourdes para nutrirse del mensaje de María y dejarse inspirar por el testimonio de Bernardita. Fue en esta Gruta donde Nuestra Señora se reveló a Bernardita como «la Inmaculada Concepción».
Creyentes o no, todos se sienten profundamente conmovidos por lo que se vive en Lourdes y llegan con la esperanza de recibir la gracia que se derrama en el Santuario.
Lourdes es conocida por las numerosas curaciones, tanto físicas como espirituales, que se manifiestan en este lugar.
NUESTRA MISIÓN
Bernardita la recibió explícitamente de María:
«Vaya a decir a los sacerdotes que se construya
aquí una capilla y que se venga en procesión».
EL SANTUARIO DE LOURDES TIENE POR MISIÓN ACOGER, SERVIR Y AMAR A TODOS LOS QUE LLEGAN A ESTE LUGAR, EN ESPECIAL A LAS PERSONAS ENFERMAS Y A LOS MÁS VULNERABLES.
El Santuario recibe a los peregrinos en la Gruta de Massabielle, invitándolos a vivir de manera tangible los gestos de Bernardita: tocar la roca de la Gruta, beber el agua de la fuente, encender una vela, rezar el rosario junto a María y contemplarla.
Ya sea en peregrinaciones organizadas, en grupo o de forma individual, el Santuario acoge a los peregrinos y visitantes tal como son, sin importar su origen geográfico, religioso, cultural o social. Su misión se centra en dar a conocer el mensaje de María y el testimonio de Bernardita.
El Santuario ofrece alojamientos medicalizados y servicios de restauración adaptados para atender a todas las personas enfermas o con discapacidad que visitan la ciudad. Lourdes es una «escuela de vida» donde, de generación en generación, se transmite el espíritu de servicio, compasión y fraternidad, así como una verdadera experiencia y vocación en el cuidado hospitalario.
NUESTRos valOrEs
Poner en práctica las virtudes de la hospitalidad, la universalidad, la gratuidad, la sencillez, la humildad y el respeto.
HOSPITALIDAD: UNA DE LAS PALABRAS CLAVE DE LOURDES. MARÍA FUE LA ANFITRIONA DE BERNARDITA EN LA GRUTA, DONDE LE ROGÓ: «¿QUIERE HACERME EL FAVOR DE VENIR AQUÍ DURANTE QUINCE DÍAS?».
Lourdes es universal. El Santuario está abierto a todo el mundo, sin excepción. Trabaja para que el mensaje de Lourdes sea accesible en el mayor número de lenguas posible y para fomentar el diálogo entre todas las culturas. Lourdes es una expresión concreta de la catolicidad de la Iglesia.
Como toda la Iglesia, el Santuario vive en una economía de donación, no de intercambio, donde el dinero no es un amo, sino un buen y necesario servidor. Los recursos del Santuario provienen principalmente de ofrendas, donaciones y legados, pues su acceso es gratuito.
Bernardita Soubirous era pobre y analfabeta, pero durante las 18 apariciones que recibió irradiaba una gran luz. El Santuario se esfuerza por mantener la simplicidad en la expresión del mensaje de Lourdes y la sobriedad en el nivel de confort de sus instalaciones.
Todos los trabajadores del Santuario — sacerdotes, empleados, voluntarios, hospitalarios y comunidades religiosas — no tienen otra ambición que llevar el mensaje de Lourdes al mayor número de personas posible. Su objetivo es adaptarlo a las realidades actuales y garantizar su perdurabilidad, anticipándose a los cambios venideros.
